POESÍAS Y CANCIONES DE AMOR EN TODOS Y CON TODOS LOS SENTIDOS. DÉCIMAS. HAIKUS. SONETOS CLÁSICOS. ROMANCES. POESÍA LIBRE. CUENTOS. REFLEXIONES. LETRAS DE CANCIONES. SEXTILLA HERNANDIANA.

lunes, 14 de septiembre de 2020

POESÍA

 ÁRBOLES  CALLADOS


Nunca volví a ese lugar, donde árboles callados

mordían calas de estrellas, como arañando un milagro.

Donde dejé las migajas de mis sueños mutilados;

y recogí mis pesares, con manotazos de ahogado.


Torné mi rumbo a otros lares, buscando amor a mi paso;

pero impromptus de tristezas, me arrastraron al pasado.

Remembranzas de paisajes, de soles descascarados,

agitando mi memoria; ganándole por cansancio.

El verbo se hizo adjetivo; quedó en mi pecho enterrado;

las hogueras del infierno, secaron al fin, mi llanto.

Me quedé sin miel, sin agua; se lastimaron mis labios;

sufrí golpes en el alma; cayó mi amor como un rayo;

tuve muy poca fortuna, no regresó hasta mis brazos.


Me fusilaron cruelmente, los ojos no me vendaron;

me fui muriendo de a poco, y, al final, me remataron.

No guardo esperanza alguna, sus despojos se quemaron;

el viento los llevó lejos; ni las cenizas quedaron.


No me pidan que regrese a juntar jazmines blancos,

en las lomas de luceros y en los cielos despejados.

Se desbordaron las aguas de este amor descontrolado;

hay que encauzarlas de nuevo, en solitarios veranos.

Esta obra del destino, por desgracia ha terminado;

quizá otro autor la reescriba, y dé otro fin a sus actos.

Tal vez, en fresas de agosto, bajo un árbol deshojado;

me reencuentre con la vida, sin pedirle nada a cambio.

Será entonces, bienvenida y, estrecharemos las manos;

como hermanas que se quieren, y, algún tiempo, se alejaron.



Autora: María Rosa Ferrarotti

05/11/2004

DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR

De Antología Poética y Cancionero

"Mucho gusto, ¿quién soy yo?"

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.



POESÍA

 

VERDE  PRIMAVERA

 

Verde primavera de blancas glicinas;

y dulces aromas de azahares y lilas.

Noches estrelladas, luna fugitiva;

brisa mañanera, mar de golondrinas.

 

Ruiseñor del monte que trina a la vida;

senderos del alma, de paz y alegría.

Tréboles de sueños que en la mente giran,

rodando en canciones de felicidad encendida.

 

Verde primavera, de sol renacida;

te dejo un poema sangrando en la tinta

de rosas moradas  y azules orquídeas ,

para que lo guardes en tus venas tibias.

 

 

AUTORA: MARÍA ROSA FERRAROTTI

23/10/2017

DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.






 

 

 

 

 

POESÍA

 

RONDA  DE  BUENOS  DESEOS

Canta niño mío con voces de olas;

con brisa de orquídeas colmadas de aromas.

Canta con la vida que en tu ser se asoma;

con crestas de nácar que trae la aurora.


Canta con lloviznas que los campos mojan;

con el aleteo de las mariposas.

Canta con tu alma blanca de paloma;

con el sol que brinca de una rosa a otra.


Canta con la luna que en sus fases brota;

con luz de estrellitas dentro de tu boca.

Canta con el ángel que tu sueño aborda;

con la primavera que en ti se prolonga.


Canta con lo que amas tallando una estrofa;

con versos bonitos abriendo en corolas.

Canta con rocíos que vistan las hojas;

con bondad infinita mostrando sus joyas.


Canta niño mío con trinos de alondras;

con ecos lejanos de las caracolas.

Canta con las fresas de una nueva historia;

con cañas de azúcar que endulcen tus horas.


Canta niño mío que es tuyo el ahora;

con mieles de risas y tardes de moras.

Canta con amigos formando una ronda;

con tus manos firmes tomando las otras.


Canta con miradas en que no haya sombras;

con paz de jazmines de pureza ignota.

Canta con el río cuando desemboca;

fluyendo contento sorteando las rocas.


Canta con bandadas que el cielo alborotan;

con tus ilusiones saltando la soga.

Canta con luceros besando la costa;

canta y que tu canto sea de victoria.

 

Autora: María Rosa Ferrarotti

31/08/2020

DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

 


 

POESÍA

 NAVEGANTE  DEL  AMOR


A  imagen y semejanza, de la luna y las estrellas;

brilló en la noche tu cuerpo, navegante de mis huellas.

Siempre soñé que eras mío, y te tuve aquí tan cerca

en ese fragor de estío; que se alegraron mis penas.


Soñé tu boca en mi boca, como el cantar de agua fresca;

soñé tus ojos de cielo, regados sobre mi tierra.

Busqué una causa perdida, la dejé en lista de espera;

luego pasó al primer puesto, vino a golpear a mi puerta.


Me sacudió con sus ansias de libertad, sin tristezas;

me devolvió la esperanza, perdida en tantas ausencias.

Ya no es perdida la causa, hoy conocí flores nuevas;

que perfuman las distancias que me alejaron de ella.


Tú eres causa de mis sueños, tú, mi amor, flor de canela;

tú me has dado tanto, tanto; y aun así, sigo sedienta.

Abrázame hasta el suspiro más profundo que tú puedas,

quiero ser entre tus brazos, como un tallo que se quiebra.


Soñé tenerte y te tengo, eres trigo de mi siembra;

flor de durazno en mi pecho, que se abre en primavera.

Amo fugarme en tu sombra, con mis manos recorrerla;

amo amar todas tus cosas, amo ser tu compañera.


Te amo por sobre todo, por ser vid de buena cepa;

que da un vino generoso, y lo bebo cuando besas.

Ya no importan las palabras, se hace fuerte tu presencia;

estando siempre a mi lado, sin dudas y sin reservas.


¡Qué no se apague el lucero! ¡Qué alumbre la luna llena

todo el amor que te tengo, para que nunca se muera!



Autora: María Rosa Ferrarotti

04/11/2004

DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR

De Antología Poética y Cancionero

"Mucho gusto, ¿quién soy yo?"

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.