OLAS RABIOSAS
DÉCIMAS
Olas de lenguas rabiosas
con su saliva de bruma,
estremecen con espuma
las arenas sediciosas
que forman dunas curiosas,
calientes cual viento norte.
Ilimitado soporte
de viejos predicamentos.
Mareas en incrementos
teclean su pianoforte.
Castañuelas amarillas
desplegadas en arenas,
con sus presencias serenas
son cual pequeñas sombrillas.
Semejan ser alfombrillas
que no desgastan los soles.
Son permanentes crisoles
apartados, solitarios,
en los amplios balnearios,
reinados por caracoles.
La sal de las circunstancias
impregna pieles y brisas.
Aparecen las sonrisas
achicando las distancias.
Ajustan unisonancias
en entregas y deseos.
Se reinician los fraseos
con horizontes de lilas.
En sus aguadas tranquilas
se prolongan los glaseos.
Se pierden tras medanales
respiraciones profundas.
Intimidades fecundas.
Carnales. Emocionales.
Arriban a sus finales.
Las estrellas se magullan.
Sus brillos se descapullan
en fugaces estadías
mostrando sus picardías
mientras miran y mascullan.
El amanecer resiste.
No brinda su bienvenida
a la figura fornida
del albor que se desviste.
En sus entrañas existe
un fragor desmesurado.
Un valioso resultado.
Eficaz. Inevitable.
De fluidez. Irrenunciable.
Por su fruición, destacado.
Autora: María Rosa Ferrarotti
04/09/2021
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Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.
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