POESÍAS Y CANCIONES DE AMOR EN TODOS Y CON TODOS LOS SENTIDOS. DÉCIMAS. HAIKUS. SONETOS CLÁSICOS. ROMANCES. POESÍA LIBRE. CUENTOS. REFLEXIONES. LETRAS DE CANCIONES. SEXTILLA HERNANDIANA.

miércoles, 3 de enero de 2024

POESÍA

SURCOS DE TULIPANES


DÉCIMAS


En surcos de tulipanes

anidaré mis esperas.

En medio de las hileras

volarán los gavilanes

de mis rapaces afanes

para robarse tus besos

sin que se queden ilesos

tus labios junto a los míos.

Incitaré desafíos

para obtener sus regresos.


Cuando en ocasos me mires

y me envuelvas en tus brazos,

sentirás aguijonazos

cada vez que tú respires

y pruebes los elixires

de amor, en cuartos crecientes.

Mis caricias impacientes

recorrerán los senderos

de tus anhelos nocheros,

deseando que las orientes.


Tulipanes rebosantes

de gualdas atardeceres,

verán que pasión requieres.

Tus golondrinas migrantes

con sus trinos incesantes

serán causas de suspiros.

En tus ojos de zafiros

reposarán mis miradas.

De las tuyas, reservadas,

descifraré sus papiros.


Mientras las tardes se cierren,

nuestros corazones prietos

se contarán sus secretos.

Cuando soles entrecierren

sus persianas y se entierren

en la paz de las llanuras,

desbordarán de dulzuras

las colmenas estelares

sobre plácidos salares

de nuestras lunas maduras.



Autora: María Rosa Ferrarotti

27/12/2023

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

Imagen de Internet.



POESÍA

DESHOJANDO MARGARITAS


DÉCIMA


Deshojando margaritas

paso las noches y días.

Tú, mi dueño te creías.

Es hora de que lo admitas

y te lleves estas cuitas

que me colman de ansiedades.

Manifiesta voluntades

para amarme sin más dudas.

En tus silencios te escudas.

Haz mis sueños realidades.



Autora: María Rosa Ferrarotti

27/12/2023

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

Imagen de Internet.

 


POESÍA

LAS RESPUESTAS


DÉCIMAS


Suturemos las heridas

en hermanos corazones.

Encendamos cual tizones

las palabras elegidas

para alegrarles las vidas

a los que males padecen.

Buenas causas engrandecen

a aquellos que reflexionan

y sus acciones las donan.

Ser felices, se merecen.


Si bondades esparcimos

y consuelos entregamos,

por limpias calzadas vamos.

Si ante injusticias rugimos

y entre todos nos unimos,

no podrán ponernos frenos.

Expulsaremos venenos

de las almas y las voces

que como mulas dan coces.

Pararemos desenfrenos.


Ejemplos, son importantes.

Y darlos, son las respuestas.

Remontar ríos y cuestas

de cuestiones indignantes,

son tareas demandantes.

Resarcir a los humanos

poniendo pan en sus manos.

Amor, paz y libertades.

Destronando las maldades

de los seres inhumanos.


Peronas mueren de hambrunas.

Conviven con los temores

y perdurables horrores

espinosos como tunas.

Se ahogan en las lagunas

de las perennes tristezas.

Se resecan las cortezas

de las vanas fantasías.

Son largas sus agonías.

Son pocas sus robustezas.


Somos únicos e iguales.

Sin que incumban las creencias.

Ni de razas, diferencias.

Verdades cual manantiales

forjarán los ideales

luminosos como estrellas.

Llenaremos las botellas

con hermandad sin fronteras.

Taparemos las goteras

del dolor, sin dejar huellas.


Les pido que me acompañen.

Que libremos las batallas

derribando las murallas

de penas y desempañen

sus mentes. Se desengañen.

Los que violencia derraman,

solo poderes reclaman

para sí mismos. Ignoran

a sus pueblos y devoran

su porvenir. Los descaman.


Juntos, siempre lograremos

elevarnos a las nubes

conformando grandes clubes

de fe, que transmitiremos.

Una bandada seremos

de palomas pacifistas.

Puliremos las aristas

de sentimientos profundos

y pensamientos fecundos,

con visiones futuristas.



Autora: María Rosa Ferrarotti

26/12/2023

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

Imagen de Internet.



POESÍA

LA MUDANZA


DÉCIMAS


Se va estrechando el camino

de la vida en la que andamos.

Seres y cosas dejamos

a lo largo del destino.

Nos convertimos en vino

nacido de vieja viña

que alguna vez fue una niña

coronada de rocío

madurando en el estío

sobre la fértil campiña.


Somos hijos de la tierra

del lugar en que nacimos.

Tarde o temprano morimos

y su raíz nos encierra.

Pero el alma no se entierra.

Se encamina derechito

hacia el mar del infinito.

Busca a Dios en la espesura

del misterio y se aventura

a encontrar su don bendito.


Cuando cambiemos de plano

quisiera llevar conmigo,

de la familia, su abrigo.

Acariciar con mi mano

desde algún lugar lejano,

el rostro de la inocencia

que fue ganando experiencia

al explorar sin medida

cada partida perdida

aumentando su sapiencia.


Todo comienza y termina

como tren con sus vagones

que transportan ilusiones,

días claros y neblina.

Agua pura, cristalina,

del amor que nos hermana.

De la luz de la mañana

que nos muestra la belleza,

la flaqueza y la grandeza

de la condición humana.


La fruta amarga de olvido

se la dejo a un cruel recuerdo.

Mientras los labios me muerdo,

guardo en mi pecho un pedido

hacia Jesús dirigido,

que con el tiempo se afianza

como la fe y la esperanza.

Que me colme de alegría

y me brinde compañía

en mi última mudanza.



Autora: María Rosa Ferrarotti

21/12/2023

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

Imagen de Internet.



POESÍA

EL  NARCISO 


DÉCIMAS


Parada frente al narciso

de tu egoísmo y tu orgullo,

escucho el triste murmullo

de un mensaje muy conciso

que exportaste como aviso

a mi amor de rosas rojas.

Se marchitaron las hojas

y sus pétalos cayeron.

Con la impotencia riñeron.

Sufrieron grandes congojas.


Hoy, no me restan lavandas

para calmar mis dolencias.

Ni jazmines de indulgencias

que carguen perdón en andas.

Desde ahora, no comandas

mis sentires amorosos

con tus bríos vanidosos

cuajados de altanerías.

Voy arrojando a las vías

sus cultivos maliciosos.


Dile adiós a mis esperas.

Al frutillar de mis besos.

A los argumentos presos

de emociones barulleras.

Al flamear de las banderas

de las mieles de mis ojos.

A los más tiernos antojos,

que he cumplido sin reservas.

Mientras tú callas y observas,

yo promuevo desalojos.


En el vacío nocturno,

tu voz es fría, desnuda.

Tu mente, cerrada y muda.

Y no pienso pedir turno

al retrato taciturno

del que fuiste y ya no eres.

Es preciso que te enteres

que las épocas pasadas

permanecen extraviadas.

Ya no ejerces tus poderes.


Un narciso solitario.

Por mi amor, abandonado.

Sin pasión y sin cuidado,

por ser injusto, arbitrario.

Un corazón sin usuario

de sentimientos muy nobles

tan fuertes como los robles,

tendrás cuando no me veas.

Pues del querer que apaleas

no escucharás más redobles.



Autora: María Rosa Ferrarotti

17/12/2023

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.

Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.

Imagen de Internet.