¡QUÉ NO SEA UNA UTOPÍA!
DÉCIMAS
¡Qué no sea una utopía!
Me dijiste que me amabas.
Que conmigo tú soñabas
cumplir con la fantasía
de hacerme tuya algún día.
Entregarnos sin medida
y darle la bienvenida
al sentir que nos embarga.
Pues amar no es una carga.
Mantiene el alma nutrida.
Rescatemos margaritas
florecidas y asombrosas
de las lunas amistosas,
rozagantes y bonitas;
rodeadas por estrellitas
titilando intermitentes
sobre deseos pendientes.
Ambos debemos cumplirlos
y de pasiones teñirlos
en conjunciones ardientes.
Dancemos como las olas
sobre mantos de arenales
de las playas tropicales,
al compás de las pianolas
y el sonido de las violas
de los trinares lejanos
en agobiantes veranos.
Que no nos ganen las prisas
y nos soplen tibias brisas
mientras me acechen tus manos.
Extirpemos de los sueños
sus bagajes imposibles.
Que se tornen en creíbles
poniendo nuestros empeños
encendidos como leños
para hacerlos realidades
al lograr las saciedades
de nuestros cuerpos unidos,
en uno solo, fundidos.
¡Qué utopías sean verdades!
Autora: María Rosa Ferrarotti
09/06/2024
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Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.
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