ÚNICAS
DÉCIMAS
Somos todas diferentes.
Inusuales mariposas
que se posan sobre rosas
de valores consistentes.
Los más básicos nutrientes
personales y sociales.
Las espigas de trigales
en el pan de cada día.
Armoniosa melodía.
Floración de naranjales.
Somos únicas, no dudo.
Somos útero materno.
En las manos, el Eterno,
nos dejó su gran escudo.
Somos brisa, no felpudo.
Defendamos los derechos
con sapiencia, con los hechos.
Protejamos la belleza
del amor y su simpleza,
descartando sus desechos.
En las horas juveniles
van cambiando las usanzas
y maduran las semblanzas
de deseos infantiles.
Al pasar muchos abriles,
el saber, las experiencias,
fortalecen las conciencias.
La vejez no nos marchita.
No nos rinde ni limita.
No sufrimos impaciencias.
En los días que nos pasan,
ilumina nuestra cara
el medir con otra vara
pensamientos que retrasan.
Liviandades los traspasan.
El espíritu doblega
soledades que disgrega
en espacios positivos.
Infinitos. Reflexivos.
Sobre pétalos navega.
Vencedoras, no vencidas.
Con coraje. Luchadoras.
Talentosas. Sembradoras
de caricias bendecidas,
como perlas esparcidas
sobre tristes corazones.
Inventamos armazones
de piedad, como podemos.
Y jamás retrocedemos.
Somos reinas. No, peones.
En la sangre que recorre
la placenta productiva,
compasiva, sensitiva,
de la paz que se descorre;
somos faro que socorre.
Adoptamos libertades.
Afirmamos dignidades.
El sufrir, nos hace fuertes,
al lograr cambiar las suertes
sin caer en flojedades.
Autora: María Rosa Ferrarotti
06/03/2022
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.
Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.
Imagen de Internet.
Dedicada a todas las mujeres abnegadas, que luchan por levantar el estandarte de la familia y la paz, en pos de un futuro mejor. Especialmente, para las valientes mujeres ucranianas.