PRÍNCIPE ENCANTADO
DÉCIMAS
El día que me encontraste
renació la primavera.
Terminó la larga espera.
A querernos me invitaste.
Con pasión me regalaste
un abrazo prolongado
con el que había soñado,
junto a un beso sofocante.
Me enamoré en un instante
de mi príncipe encantado.
Escribimos la epopeya
más grande, dulce y gloriosa.
Como pétalo de rosa
caí a tus pies cual plebeya.
Fui aromada cataleya,
exótica y delicada;
suavemente acariciada
en mi piel de terciopelo.
Ambos tocamos el cielo
en la noche desvelada.
Descartaste tu armadura
de caballero valiente.
Conquistaste el continente
de mi amor con tu dulzura
y perdimos la cordura
como quien ve un espejismo.
Sentimos real magnetismo.
Subimos hasta la cima
donde nada se escatima
lanzándonos al abismo.
Sobre el puente levadizo
del castillo del deseo
realizamos un paseo
bajo la luna y su hechizo.
Yo no sé lo que nos hizo
pero quedé convencida
que lo que reste de vida
seré feliz en tu reino
mientras de auroras me peino
siendo por ti poseída.
Autora: María Rosa Ferrarotti
31/08/2024
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR.
Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.
Imagen de Internet.
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