DESDÉN
Tu indiferencia es tortura, no tengo oxígeno ni agua.
Tengo el dolor anudado en medio de mis entrañas.
En mi mente, sin remedio, llevo grabada tu cara;
tu sonrisa embriagadora, tus besos y tus miradas.
Tus verdades, te atormentan; tus miedos, las acaparan;
balbucean como locas, y como brisa, se escapan.
No son tuyos mis desvelos, ni son mías tus mañanas;
hace rato que no guardo, lunas llenas en mi almohada.
Mi vida, se ha vuelto un caos; angustiosa y desgraciada.
Sin piedad, diste la espalda, al trebolar de mis ansias.
Quiero que sepas ahora, que no busco una revancha;
solo piensa, que tu orgullo, no pisará más mis playas.
Cuando llegaste a mi vida, me acostumbré a tus tardanzas;
hoy no quiero que regreses, tendrás las puertas cerradas.
Al volcar sal en mi vino, arruinaste la esperanza
de estar juntos para siempre, imaginando un mañana.
Yo, ya no te pertenezco; es decir, en cuerpo y alma;
has quedado mal parado, con tu desdén y tu infamia.
Voy a cortar por lo sano; no soy perversa ni ingrata;
tengo claras mis ideas, tu presencia no hace falta.
Quiero que quede bien claro, llevo la frente muy alta;
no caeré más en tus redes, ni comeré tu carnada.
Autora: María Rosa Ferrarotti
24/08/2005
DERECHOS RESERVADOS DEL AUTOR
De Antología Poética y Cancionero
"Mucho gusto, ¿quién soy yo?"
Luján, Pcia. de Buenos Aires, Argentina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario